Un día diferente para el Señor Amos

Portada del libro Un día diferente para el señor Amos

Amos McGee trabaja en el zoológico cuidando a los animales. Pero hace algo más a parte de cuidarlos. Amos es su amigo y se preocupa a diario de buscar un rato para jugar al ajedrez con el elefante, hacer compañía al tímido pingüino, jugar a las carreras con la tortuga, cuidar al resfriado rinoceronte y leer cuentos al búho miedoso. 

Pero un día Amos se despierta muy resfriado y no puede ir a trabajar. Los animales echan mucho de menos a su amigo y todos juntos deciden hacerle una visita.

Los autores

Philip C. Stead, estadounidense,  es escritor de libros infantiles ilustrados. Junto a su mujer, Erin E. Stead, ilustradora de libros infantiles, ha publicado, además de Un día diferente para el señor Amos, Oso quiere contar una historia, también publicado por la editorial mejicana Oceano Travesía. Ambos han publicado libros ilustrados para niños también de forma individual.

En 2010 el New York Times calificó Un día diferente para el señor Amos como el mejor libro ilustrado del año. La revista norteamericana Publishers Weekly también lo incluyó en la lista de mejores libros infantiles de ese año. Además obtuvo la prestigiosa Caldecott Medal.

Una curiosidad sobre el autor es que además de escribir, compone músicas para sus cuentos y lo de su mujer Erin. Lo podéis ver todo en su página.

Mi opinión

La historia del Señor Amos es sencilla y desprende cariño desde la primera página. Con una clara intención de dejarle el protagonismo a la imagen, este cuento transmite valores universales como la amistad, el compañerismo, la generosidad, y todo sin casi darnos cuenta de ello.

Gracias a una maravillosa combinación de texto e ilustración captamos perfectamente las personalidades de cada uno de los personajes: la timidez del pingüino con su bufanda roja, la calma y tranquilidad del elefante que juega al ajedrez, y por supuesto el Señor Amos, calmado, tranquilo, con una agradable sonrisa en la cara incluso cuando está enfermo en su casa.

Amos saliendo de su casa

Una de las páginas que más me gustan es en la que el Señor Amos sale de su casa para ir al trabajo. Casi no hay texto pero es una ilustración preciosa, con esa pequeña casita rodeada de bloques de pisos, y con pequeños detalles y cosas curiosas, como ese ratoncillo esperando en la calle junto a una diminuta parada de autobús o la sombra en una ventana de otro protagonista silencioso que aparece repetidamente en la historia.

Todo el libro está plagado de detalles pequeños, sencillos pero que le dan calidez y ternura a la lectura.

En definitiva una historia hecha con mucho cariño y que se puede ver en cada página. Las ilustraciones llaman la atención por los contrastes entre las finas líneas del trazado de los dibujos y los vivos colores de aquello que quieren resaltar: el traje del Señor Amos, los calcetines del pingüino o la bufanda roja del rinoceronte, y por supuesto el globo.

Este es uno de los libros que leemos por las noches a mi hija mayor de 4 años. Cuando empezamos a leerle cuentos antes de dormir, la idea inicial era que ella tomara una rutina para irse a dormir y los cuentos solían ser siempre sobre temáticas que de alguna manera invitaran al sueño.

El búho lee un cuento pues sabía que Amos le tenía miedo a la oscuridad

Este cuento ha venido a nuestra casa con ese hábito ya adquirido sobradamente, pero también podría haber ayudado, ya que el final del cuento es una sucesión de buenas noches a todos los amigos y una tierna imagen de los amigos durmiendo con el pingüino observando a la luna y su amigo el globo.

Gracias a los detalles en la ilustración, las relecturas del libro pueden tener siempre algo nuevo que descubrir: los ratoncitos, pájaros que ayudan en algún momento de la historia, el globo, los pingüinos, el oso de peluche de Amos…hay tanto que descubrir…

Uno de esos cuentos que los niños se aprenderán de memoria de escuchar leerlo y podrán mirar y repasar solos cuando les apetezca.

Datos bibliográficos:

Título: Un día diferente para el Señor Amos

Autor: Philip C. Stead

Ilustrador: Erin E. Stead

Edición: Oceano Travesía, Barcelona, Mexico, 1ª ed. 2011